La Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH), regional Impenetrable, expresó su repudio a las declaraciones del intendente de Miraflores, Rafael Frías, quien durante los actos por el 85° aniversario de la localidad sostuvo que la Wiphala no debía izarse junto a las banderas nacional, provincial y municipal porque el emblema de los pueblos originarios “no representa a un Estado”.
En un comunicado titulado “La Wiphala flamea porque los pueblos indígenas son preexistentes al Estado”, la organización recordó que la Constitución Nacional, en su artículo 75 inciso 17, reconoce la preexistencia étnica y cultural de los pueblos indígenas argentinos, y que dicho reconocimiento “se traduce en derechos que el Estado está obligado a respetar y que los funcionarios públicos deben conocer y cumplir”.
“El pueblo indígena tiene su propia identidad, que se expresa en símbolos como una bandera que declara su pertenencia, su origen y su condición de pueblo reconocido”, señaló la APDH. Además, recordó que en la provincia del Chaco, a partir de la Ley N° 7912, la Wiphala fue incorporada de manera oficial a las ceremonias en instituciones públicas.
La entidad consideró que “acciones contrarias a las promovidas por la ley atentan contra la diversidad cultural de nuestros territorios y cargan con un mensaje negacionista que no puede permitirse en una convivencia democrática, menos aún viniendo de un funcionario público que debe garantizar los derechos de toda la población”.
La polémica surgió luego de la inauguración de los tres mástiles en el boulevard de la avenida San Martín, ocurrido el pasado 3 de octubre, donde fueron izadas las banderas nacional, provincial y municipal. Durante el acto, el intendente Frías explicó que la Wiphala “no está porque no refleja a un Estado sino a una comunidad”, al tiempo que aseguró que el municipio mantiene “especial atención a la comunidad originaria en montones de cuestiones”.
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