¿Querés pestañas nivel pro sin gastar ni un peso en extensiones? Descubrí el truco que usan los maquilladores para lograr el máximo volumen y largo en tiempo récord. El único requisito es tener máscara de pestañas y un ingrediente que seguro tenés en tu botiquín.
Si hay algo en el makeup que tiene un poder transformador instantáneo, son las pestañas. Lograr ese “efecto abanico” que vemos en las modelos o actrices —largas, densas y curvadas— sin recurrir a las extensiones o a las molestas pestañas postizas, parecía una misión imposible.
Pero, como suele suceder, el mundo del beauty profesional tiene un hack simple, rápido y económico que podés hacer en tu casa en menos de un minuto. Es un secreto que usan los maquilladores para darles a las pestañas un volumen extremo y que ahora se volvió viral en redes.
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El truco de pestañas para lograr el ‘efecto extensiones’ consiste en aplicar una capa de polvo traslúcido (o fécula de maíz) entre la primera y la segunda capa de máscara de pestañas. Este polvo actúa como un “relleno” o fibra que aumenta inmediatamente el grosor y el largo de las pestañas sin usar productos especiales.
¿Cuál es el “ingrediente secreto” para el volumen XXL?
La clave de este truco no está en la máscara que uses (aunque siempre ayuda que sea de buena calidad), sino en un producto inesperado que actúa como si fueran microfibras caseras: el polvo traslúcido (o polvo volátil para sellar el maquillaje).
Si no tenés polvo traslúcido, podés usar un recurso de cocina igualmente efectivo: un poquito de fécula de maíz o almidón. La textura ligera y fina de estos polvos permite que se adhieran a la máscara húmeda, engrosando cada pestaña antes de la siguiente aplicación.
El paso a paso para un “efecto extensiones” en 60 segundos
Acá te explicamos la técnica que te va a dar ese volumen increíble:
- Preparación: Asegurate de tener las pestañas limpias y, si tenés un rizador, dales una pasada rápida para curvarlas.
- Primera capa: Aplicá tu máscara de pestañas habitual, cubriendo bien desde la raíz hasta las puntas. ¡No dejes que se seque!
- El relleno: Este es el momento mágico. Con la máscara aún húmeda, agarrá un hisopo limpio o un pincel pequeño y aplicá un poquito de polvo traslúcido o fécula sobre la punta del hisopo. Dá golpecitos muy suaves sobre tus pestañas (principalmente en el cuerpo, no en la raíz). Vas a ver inmediatamente una capa blanquecina.
- Sellado y volumen final: Volvé a aplicar una segunda (y si querés, una tercera) capa de máscara de pestañas. La máscara va a “sellar” el polvo, lo que se traduce en un grosor y un largo impresionantes, como si hubieras usado fibras.
¿Por qué funciona tan bien este hack?
Al igual que las máscaras con fibras que prometen alargar, el polvo traslúcido cumple esa función de relleno. Agrega una capa de sustancia a la pestaña que la máscara por sí misma no podría lograr. El resultado es un look dramático, pestañas más densas y un efecto óptico de extensión que dura todo el día sin el riesgo de que se caigan las postizas.
Si sos de las que prefiere un look natural, podés usar el truco solo en las puntas para un extra de largo. Si, en cambio, buscás el máximo impacto, aplicá la técnica en todas las pestañas, ¡y preparate para el efecto wow!