“El planeta arde, pero no se preocupen, acá tienen la lista de los 27 vestidos de Lauren Sanchez”, se leyó en otro de los carteles.
Decenas de manifestantes se reunieron en la Plaza de San Marcos de Venecia el jueves por la mañana y realizaron una boda falsa para protestar por las nupcias del multimillonario Jeff Bezos con su prometida Lauren Sánchez en la ciudad de la laguna.
Dos figuras enmascaradas vestidas de recién casados fueron encadenadas a cuatro personas agachadas en el suelo, cada una con un cartel con las palabras “gobiernos”, “los medios de comunicación”, “la economía” y “justicia”.
En una gran pancarta sostenida por los manifestantes se leía: “Guerra en la Tierra, negocios en el espacio”. Otros carteles dicen “el 2% posee el 45% de la riqueza mundial” y “Sequía para todos”.
“El planeta arde, pero no se preocupen, acá tienen la lista de los 27 vestidos de Lauren Sanchez” y otro que dice: “Gobiernos, medios de comunicación, empresas y justicia, atados por los superricos”.
“Con el dinero de esta boda podríamos reconstruir Gaza”, se leyó en otro de los carteles.
Después de unos 20 minutos la policía disolvió a los manifestantes y con la ayuda de algunos soldados los sacó a todos de la plaza.
Más protestas por la megaboda del año
El fundador de Amazon, Jeff Bezos, y Lauren Sanchez llegaron a Venecia, Italia, el miércoles antes de su boda de fin de semana repleta de estrellas, que ha galvanizado a una variedad de manifestantes.
Bezos saludó desde un taxi acuático cuando él y Sánchez llegaron al muelle del Hotel Aman en el Gran Canal con dos barcos de seguridad a cuestas.
Su boda ha provocado protestas de grupos que lo ven como un signo de la creciente disparidad entre los que tienen y los que no tienen, mientras que los residentes se quejan de que ejemplifica la forma en que sus necesidades son ignoradas en la era del turismo masivo en la histórica ciudad de la laguna.
Alrededor de una docena de organizaciones venecianas, incluidos defensores de la vivienda, activistas contra los cruceros y grupos universitarios, se han unido para protestar contra el evento de varios días bajo el lema “No hay espacio para Bezos”, un juego de palabras que también hace referencia al reciente vuelo espacial de la novia.
Han organizado protestas a pequeña escala, desplegando pancartas contra Bezos en lugares emblemáticos de Venecia.
A ellos se unieron el lunes Greenpeace y el grupo británico “Everyone Hates Elon”, que ha destrozado Teslas para protestar contra Elon Musk, para desplegar una pancarta gigante en la Plaza de San Marcos en protesta por las supuestas exenciones fiscales para los multimillonarios.
El miércoles, otros activistas lanzaron una carroza por el Gran Canal en la que aparecía un maniquí de Bezos aferrado a una caja de Amazon y con los puños llenos de dólares falsos.
La empresa de publicidad británica que anunció el acto dijo que no se trataba de una protesta por la boda “sino contra la riqueza descontrolada, el control de los medios y la creciente privatización de los espacios públicos”.
Los activistas locales habían planeado una protesta más organizada para el sábado, con el objetivo de obstruir el acceso a los canales con barcos para evitar que los invitados lleguen al lugar de la boda.
Modificaron la protesta a una marcha desde la estación de tren después de proclamar una victoria, afirmando que su presión obligó a los organizadores a cambiar el lugar al Arsenale, un sitio más fácil de asegurar más allá del congestionado centro de Venecia.
Una ciudad con bodas constantes
Venecia, famosa por sus románticas vistas de canales, acoge cientos de bodas cada año, y no pocas veces las de personas ricas y famosas.
Las bodas de celebridades anteriores, como la de George Clooney con la abogada de derechos humanos Amal Alamuddin en 2014, fueron recibidas con agrado por el público.
Cientos de personas acudieron al Ayuntamiento para desearle lo mejor a la pareja.
Los críticos citan las prácticas laborales de Amazon, las actuales disputas fiscales con los gobiernos europeos y las asociaciones políticas de Bezos como motivos de preocupación.
Los activistas también argumentan que la boda de Bezos ejemplifica fallas más amplias en la gobernanza municipal, en particular la priorización del turismo por sobre las necesidades de los residentes.
Citan medidas como el impuesto para excursionistas —que según los críticos refuerza la imagen de Venecia como parque temático— como ineficaces.
Una de sus principales preocupaciones es la falta de inversión en viviendas asequibles y servicios esenciales.
Los funcionarios defienden el evento
El alcalde Luigi Brugnaro calificó el evento como un honor para Venecia y la ciudad negó que la boda causara interrupciones.
Mientras tanto, una asociación de investigación ambiental veneciana, Corila, emitió un comunicado diciendo que el Fondo para la Tierra de Bezos estaba apoyando su trabajo con una “donación importante”.
Corila, que reúne a académicos universitarios y al principal consejo nacional de investigación de Italia para investigar las estrategias de protección venecianas, no quiso decir cuánto estaba donando Bezos, pero dijo que el contacto comenzó en abril, mucho antes de que comenzaran las protestas.
