La compañía llega a esta instancia del año con una presencia comercial por demás acotada y plena incertidumbre respecto de qué pasará con sus plantas
La situación de una de las compañías de peso en el mapa nacional de la lechería no deja de complicarse y su futuro aparece cada vez más comprometido.
Si bien retomó parte de su actividad a fines de septiembre, tras cuatro meses de parate, y activó un plan de pago de salarios adeudados con sus casi 700 operarios —que igual sigue sujeto a demoras—, Lácteos Verónica continúa complicando su presente financiero y ahora enfrenta el reclamo de algo más de 150 tambos a los que debe millones de dólares por la falta de pago de leche cruda. Al mismo tiempo, los cuestionamientos a la empresa crecen a la par de una emisión de cheques sin fondos que parece no tener techo: Lácteos Verónica acumula 3.648 documentos girados de esa forma. La firma sigue perdiendo presencia comercial.
Mega empresa de lácteos, en crisis: debe millones de dólares y le rechazan miles de cheques
Según pudo constatar iProfesional en la base de datos del Banco Central (BCRA), Lácteos Verónica llega a esta instancia de 2025 con una deuda por cheques sin fondos del orden de los $13.145 millones. De todos los cheques que giró este año, la lechera apenas cubrió el 17.8 por ciento.
El BCRA detalla que Lácteos Verónica mantiene deudas con bancos como el Macro y el Galicia, y con entidades de crédito como Trend Capital, Credibel, Libertador e Intercapital Factoring, entre otras.
A la par de esta situación, la directiva de la compañía ahora afronta el reclamo de una serie de tambos a los que Lácteos Verónica adeuda montos millonarios en concepto de entrega de leche cruda. De acuerdo a sitios especializados como Bichos de Campo, tan solo en la zona de Suardi, en Santa Fe, la empresa debe pagos a 80 establecimientos.
Además, la compañía también posee deudas con 36 tambos del área de Lehmann y otros 35 distribuidos entre Clason, San Genaro y Totoras. Al mismo tiempo, Lácteos Verónica también incumplió pagos con 20 transportistas de leche. Se estima que, en total, la firma adeuda a sus proveedores alrededor de 60 millones de dólares.
Lácteos Verónica y su dependencia de terceros
Como expuso iProfesional en otros artículos, la falta de insumos complica la recuperación de Lácteos Verónica, que hoy depende de la producción “a fazón”, esto es, para terceros, en dos de sus plantas (Lehmann y Suardi), aunque no consigue reactivar la elaboración de lácteos en sus instalaciones en Clason.
Precisamente, en ese punto productivo es que sigue manifiesta la crisis que atraviesa a la lechera: en Clason, Lácteos Verónica apenas si alcanza a procesar 20.000 litros de leche cada dos días. Ese flujo le permite concretar una hora de envasado.
En esa misma planta, la elaboración de quesos, dulces y manteca sigue detenida por completo, lo cual explica por qué Lácteos Verónica sigue ausente en la mayoría de las góndolas y heladeras de los supermercados.
“La planta de Clason sigue prácticamente parada. Los sectores donde se elaboran manteca, dulce y queso están parados por falta de leche y de insumos, porque no hay nada”, declararon hace escasas semanas sendos delegados de los trabajadores de la lechera.
En paralelo, aclararon que en el resto de las plantas de la compañía la situación es diferente.
“En otras instalaciones, los dueños de la empresa vienen cumpliendo al pie de la letra, como está acordado. En Lehmann y en Suardi están trabajando, que es donde está el secado de leche y la producción de queso barra. Están trabajando las jornadas completas, pero es todo a fazón”, añadieron las fuentes. Vale mencionar que la firma genera productos para compañías como Saputo y Punta del Agua.
La posibilidad de la venta, sin avances
En simultáneo a la decisión de retomar de alguna forma la producción en Lácteos Verónica, la posibilidad de que la familia Espiñeira, sus actuales dueños, promuevan un traspaso de activos sigue en la indefinición.
Vale recordar que recientemente un nombre comenzó a repetirse entre los potenciales interesados en la estructura productiva de la compañía. Se trata de una firma de capitales franceses que ya juega fuerte en el mapa de la lechería nacional.
Se trata de la francesa Savencia, que en la Argentina controla marcas como Milkaut, Santa Rosa, Ilolay, Adler y Bavaria. La firma en cuestión ocupa el tercer lugar en el ranking de las lácteas que más procesan leche a nivel nacional, con un volumen del orden de los 1.528.943 litros diarios.
Sin embargo, las diferencias que mantienen los integrantes de la familia Espiñeira entre sí redundó en una falta de avances respecto del futuro comercial —y societario— de Lácteos Verónica.

